lunes, 23 de febrero de 2009
La satisfacción
Equivalencia binaria: 001 000
Equivalencia decimal: 8
Equivalencia confuciana: 16
Si todo lo que se hace está docilmente sometido a las grandes normas, se alcanza una armonía perfecta.
La complacencia por haber alcanzado metas ansiadas usando tretas de mala ley, provoca indefectiblemente el remordimiento.
Cuando todo son quejas sin fin, se vive muriendo. Si todo son proclamaciones de placer, se vive locamente. En ambos casos se impone un cambio rápido.
Soportar penalidades no es un castigo.
Nadar en la opulencia no es un premio.
Sólo la armonia interior brinda la verdadera satisfacción
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